BOLIVIANOS EN ARGENTINA (2da. Parte)

Después de la xitosa campaña de la selección boliviana de 1993-94, varios jugadores bolivianos (de la selección, casi todos) fueron contratados por clubes de Argentina.

Julio Baldivieso jugó para un mediocre Newell's Old Boys la temporada 95-96, donde rindió en un nivel mas que aceptable (25 PJ, 5 Goles), teniendo en cuenta que el club se encontraba en crísis institucional, luego de la controvertida incorporación de Maradona en 1994.

Luis Héctor Cristaldo pasó de Bolivar al hoy desaparecido, Mandiyú de Corrientes, donde estuvo corto tiempo, ya que el equipo correntino descendió inevitablemente de categoría. Cristaldo jugó 12 partidos y no convirtió goles, además fué dirigido por el debutante entrenador, Diego Maradona, y tuvo como compañero, entre otros, al "vasco" Goycohea.

Gustavo Quinteros, argentino nacionalizado boliviano, regresó a su país natal al ser transferido de The Strongest a San Lorenzo en 1995, coincidiendo con una gran campaña del San Lorenzo del "bambino" Veira, Campeón del torneo Calusura '95, siendo Quinteros suplente en la mayoría de los partidos. Durante 1997-98, jugó en Argentinos Juniors, donde terminó su carrera futbolística. Su campaña, entre San Lorenzo y Argentinos, fué: 56 PJ, 2 Goles.

Oscar Carmelo Sanchez, fué transferido por The Strongest a Gimnasia y Esgrima de Jujuy en 1996, donde jugó hasta el torneo Clausura '98. Durante el tiempo en que estuvo en el equipo jujeño, realizó una gran campaña que le valió su incorporación a Independiente, dirigido por César Luis Menotti, en la segunda mitad de 1998. En el "rojo" también se destacó y fué titular indiscutido, y aún figura, hasta que a finales de 1999, al no estar en los planes del D.T. Enzo Trossero, regresó a The Strongest. El "cabezón"totalizó 62 PJ, y 13 goles.

Milton Coimbra, jugador que aparecía de la mano de Dussan Draskovic de titular en la selección boliviana '96, fué transferido de Oriente Petrolero a Lanús, donde jugó entre 1996-97. No satisfi´zo las espectativas que el club tenía de él, cumpliendo una mediocre campaña. PJ 14, 0 Goles.

Ivan Castillo, jugó en Gimnasia y Esgrima de Jujuy entre 1997-99; ante el éxito de Sanchez y también su buen rendimiento en la selección Iván estuvo de lateral-volante izquierdo cumpliendo de manera regular. Pj 35, sin goles.

Marco Antonio Sandy, llegó también a Jujuy (1198-2000) luego de una desafortunada incursión en el Valladolid de España, la intención era cubrir el vacío dejado por la partida de Sanchez a Independiente. Cumplió, aunque no consiguió equiparar lo hecho por el "cabezón" Sanchez. PJ 46, 4 Goles.

Diego Bengolea, siguiendo la seguidilla de incorporaciones de bolivianos a Jujuy, pasó a Gimnasia en 1998, donde jugó alternativamente hasta 1999; debido a la intermitencia de sus presencias no pudo consolidarse y se marchó sin dejar huella.

Recién en 2004 un jugador boliviano fué nuevamente contratado por un club argentino, se trató de Ronald Raldes, quién pasó de Oriente Petrolero a Rosario Central. Raldes, durante el tiempo que estuvo en Rosario (2004-08), tuvo grandes actuaciones, especialmente en sus primeros torneos conviertiéndose en líder e indispensable para la defensa "canalla" (se especuló sobre su posible paso a River), pero debido a la crísis económica del club, en parte, y también a una caída en su rendimiento, dejó el club en 2008. En total jugó 136 partidos, convirtiendo 3 goles.

Por el éxito de Raldes, otros dos jugadores bolivianos llegaron a Rosario Central: Ronald Arana, cuya estadía en Central fué efímera y practicamente nominal y José Alfredo Castillo quien en 2006 jugó 3 partidos, sin anotar ningún gol.

Joaquín Botero, precedido de un mas que aceptable rendimiento en Pumas de México, llegó para jugar en San Lorenzo en 2006. Fué un fiasco, ya que no rindió en absoluto y se marchó dejando en las estadísticas, 2 PJ y 0 Goles.

BOLIVIANOS EN LA ARGENTINA (1ra Parte)

La influencia del fútbol argentino sobre el boliviano es y ha sido muy importante desde tiempos incluso anteriores al profesionalismo(1930 en la Argentina, 1950 en Bolivia).

El futbol boliviano ha contado con miles de futbolistas argentinos entre sus clubes, incluso muchos de ellos nacionalizándose jugaron para la selección boliviana. En comparación, la cantidad de jugadores bolivianos que han jugado en la Primera División de Argentina, es exigua.Lo que sigue, pretende ser un Dossier de todos ellos, especialmente los casos en que jugadores de The Strongest emigraron hacia el Río de la Plata:

El primer jugador boliviano en jugar en la Primera División de Argentina fué "atigrado", se trata del arquero Vicente Arraya, apodado "La Flecha Andina", lo hizo en 1944 para Atlanta. Pese a que no tuvo una labor destacada, fué el precursor. En esa temporada jugó solo un partido, el 12 de noviembre de 1944 frente a Racing Club en cancha de Chacarita Jrs., recibiendo 2 goles en contra. En 1945, por lesión del arquero titular Carletti, Arraya atajó en 7 partidos y recibió 15 goles.

Victor Agustín Ugarte, fué el segundo jugador boliviano que llegó a la Argentina, firmó para San Lorenzo de Almagro en 1958, allí jugó solo 3 partidos (las 3 primeras fechas), marcó su único gol en su debut, el 23 de marzo, ante Gimanasia y Esgrima La Plata, cuando ambos equipos empataron 3-3 en el viejo Gasómetro.

Wilfredo Camacho, Ramiro Blacutt y el defensor De Lorenzo, fueron en 1962 a Ferro Carril Oeste, con suerte disímil. Willy jugó 22 partidos, Blacutt 12, y De Lorenzo 1; Camacho y Blacutt convirtieron 1 gol, ambos en el mismo partido del 5 de agosto ante Chacarita, dándole la victoria por 2-1. Pero no fué un buen año: Ferro descendió a segunda división.

Carlos Aragonés jugó en Juventud Antoniana de Salta, cuando aún era muy jóven y ni había debutado en el fútbol boliviano. Jugó el Nacional de 1975, aunque no contamos con los registros existen las referencias de que fué goleador y retornó a Bolivia para jugar en Bolivar en 1976.

Erwin "Chichi" Romero, uno de los mejores jugadores bolivianos de la historia, llegó a Quilmes en 1980, jugó 24 partidos y convirtió 2 goles, uno de ellos a Gatti, arquero de Boca, en partido que empataron 2-2.

Miguel Aguilar, fué el cuarto boliviano en Ferro Carril Oeste, jugó 15 partidos y convirtió un gol.

Milton Melgar, sin duda ha sido el jugador boliviano de mejor campaña en la Argentina. Llegó proveniente de Blooming a Boca Jrs. en la temporada 1985-86, y estuvo hasta 1987-88, en Boca jugó 92 partidos y convirtió 3 goles y ganó la Liguilla Pre-Libertadores de 1986; se constituyó en uno de los jugadores mas importantes para el Boca de Menotti que peleó el título 86-87. En 1988-89 es transferido a River Plate, donde Menotti precisamente era D.T., en River no tuvo la misma regularidad, jugó 23 partidos y no convirtió goles.

Ramiro Castillo es el de mas extensa trayectoria en clubes argentinos; fué contratado por Instituto de Córdoba en 1987-88, llegaba precedido de una fulgurante campaña: campeón con The Strongest en 1986 y seleccionado boliviano en el preolímpico '87 y Copa América del mismo año; en Instituto jugó 27 partidos y convirtió un gol. Fué transferido a Argentinos Juniors, allí atravesó su mejor etapa y en dos temporadas (88-89, 89-90) jugó 69 partidos y metió 8 goles. Su campaña lo llevó a River en 1991-92, donde no le fué tan bien, 10 partidos, 1 gol. Posteriormente, luego de un breve retorno a The Strongest a finales de 1991, jugó en Rosario Central en 1992, 16 partidos, 0 goles. Su último equipo fué Platense en 1993-94, donde jugó 23 partidos sumando un gol. Los número finales de Ramiro en Castillo en la Argentina fueron: 145 partidos, 11 goles.

Bibliografía: Revista Superfutbol No.15 1987, Revista El Grafico.

DEBUT Y EMPATE - La Logica Perdida

LA PRENSA DIGITAL.

El estreno de Sandro Coelho como director técnico de The Strongest fue con empate sin goles frente a Real Potosí. A ello hay que añadir que la producción del cuadro de Achumani no fue buena en la primera parte, aunque mejoró en la segunda por las situaciones que tuvo; sin embargo, el DT tendrá que trabajar mucho con sus dirigidos para mejorar la propuesta que se vio ayer en el estadio Hernando Siles.
Si bien tuvo el balón en su poder en la mayor parte del compromiso y generó varias situaciones de riesgo sobre el arco rival, eso no quiere decir que el juego del conjunto haya sido el esperado por el entrenador.
Hay que anotar también que Real Potosí vino a conformarse con el empate, se agrupó bien de media cancha para atrás, incluyó un solo delantero de punta, mostró claramente que el negocio era no perder y tampoco se esforzó mucho por llevarse las tres unidades en disputa.
Al inicio de las acciones parecía que el “Tigre” se iba a llevar por delante al “Lila”, en cinco minutos generó cuatro situaciones con Limberg Gutiérrez como principal protagonista; el “Bomba” exigió con remates de media distancia y servicios de esquina a la última línea de la visita.
La velocidad del comienzo fue rebajando poco a poco a medida que pasaban los minutos; es cierto que el The Strongest estaba parado en tres cuartas parte de cancha para arriba, pero sus arremetidas no eran tan contundentes como para pensar que en cualquier momento podía abrirse la cuenta.
No hubo conexión entre el medio campo y el ataque, el argentino Vázquez estuvo solo arriba, poco le ayudó Menacho y los generadores del juego (Gutiérrez y Merlo) también estaban distanciados, eso hizo que la labor defensiva de su adversario se simplificara.
Real Potosí, por su parte, no hizo nada. Superados los 30 minutos, no había llegado ni una vez con peligro hasta el arco de Damián Grosso. Si con equipo completo estaba replegado en su cancha, la actitud defensiva fue mayor después de la expulsión de Ronald Eguino por doble amonestación cuando se jugaba el minuto 31 de iniciadas las acciones.
A los 36" el “Lila” tuvo su primera jugada de gol, un remate de lanzamiento de falta de Roberto Correa obligó a Grosso a esforzarse y sacar la pelota al córner.
Después el “Tigre” continuó insinuando, pero sin la fuerza que se necesitaba para superar la doble barrera defensiva que el potosino había dispuesto en la cancha.
El segundo tiempo tuvo más emociones por la voluntad que pusieron los “atigrados” por hacer respetar su localía; Coelho decidió el ingreso de Nelvin Soliz, quien por la banda derecha le dio mayor movilidad al ataque; los ataques aumentaron en número y de a poco Mauro Machado se fue convirtiendo en la muralla que el The Strongest no supo derribar. Su primera intervención esforzada llegó en el minuto 13, Gutiérrez encaró hacia el arco y el golero salió achicar el ángulo, y dio rebote; el balón le llegó a Vázquez, quien sacó un fuerte remate de derecha que el arquero volvió a rechazar.
Después ingresó Carlos Saucedo para darle mayor fuerza al ataque, dispuso de algunas situaciones con cabeza y con los pies, falló en todas, varios de sus toques pasaron cerca del arco, otros fueron despejados y en algunos apeló a la jugada demás.
El “Tigre” siguió intentando con remates de media distancia de Chumacero y del “Bomba”, con incursiones de Vázquez, Saucedo y Nelvin Soliz, pero definitivamente se le había cerrado el arco, no significa otra cosa la acción a los 35", cuando Mauro Machado en dos tiempos evitó la caída de su arco, parecía que la pelota impulsada por Saucedo ingresaba al arco, el golero pudo levantar las manos y se quedó con la pelota.
Con David Cerutti en cancha, el The Strongest atacó con tres de punta, pero tampoco pudo liquidar. La última jugada tuvo a Rosauro Rivero como protagonista, conectó de cabeza un servicio de esquina de Gutiérrez, la pelota salió desviada a poca distancia del palo de Machado, que estaba vencido.
Real Potosí tuvo lo suyo de contragolpe, pero con un solo atacante de punta poco pudo hacer, estaba escrito desde el inicio que un buen negocio era el empate.
La otra mirada
BIEN
La vuelta a las canchas después de nueve meses de Alejandro Chumacero fue buena. El “choquito” fue recuperado por Sandro Coelho y ayer estuvo entre los titulares, jugó como sabe e incluso se animó a buscar el arco rival. Los adversarios no midieron a la hora de enfrentarlo y le dieron con todo al juvenil que hace poco cumplió 18 años.
FLACO FAVOR
El de Ronald Eguino para su equipo. El zaguero “lila” fue el primer amonestado del partido cuando se jugaba el minuto 13. Se fue de la cancha a los 31" después de una fuerte entrada sobre Percy Colque. Nadie de su equipo se animó a reclamar el cobro del juez porque su expulsión fue correcta.
THIAGO, DE VUELTA
El brasileño Thiago Leitao está en La Paz y está cerca de volver a The Strongest. El volante, quien el año pasado jugó en dos etapas en el “atigrado”, dijo que las conversaciones están adelantadas con la dirigencia y que en esta semana se puede llegar a un acuerdo definitivo.
Comentó que se abre la posibilidad de ocupar el cupo de extranjero de Sandro Coelho, quien ahora desempeña las funciones de técnico.
EXTRANJEROS
El “Tigre” de Sandro Coelho comenzó y terminó el partido con tres extranjeros. La plaza que él ocupaba en el equipo de Julio César Toresani no fue cubierta. En el inicio estuvieron Grosso, Merlo y Vázquez; durante el partido salió el mediocampista y cerca del final ingresó David Cerutti.
LAS AMARILLAS
Los amonestados “atigrados” fueron Jorge Ortiz y Rosauro Rivero; mientras que en el “Lila” la tarjeta amarilla fue para Gonzalo Galindo, Mauro Machado, Luis Ribeiro y Roberto Correa.
EL DUELO
Toda la tarde intentó Limberg Gutiérrez, pero al frente estuvo Mauro Machado, quien le ganó la pulseta al “atigrado”.
El Árbitro
Regular
Lo único que hay que reprocharle al juez del compromiso fue el haber sido permisivo con la distancia de las barreras. Los realistas se salieron con la suya en todos los tiros libres favorables al “Tigre”. Después sacó adelante el partido, obró bien en las amonestaciones y en la expulsión de Ronald Eguino.
LA FIGURA
MACHADO
En el segundo tiempo se mandó varias y buenas atajadas que le negaron el grito de gol a The Strongest. El golero estuvo inspirado y evitó la caída de su arco. A él hay que reconocerle el mérito para que su equipo no se vaya vencido a la Villa Imperial.
Las frases
Creamos muchas situaciones de gol, pero no estuvimos certeros en la puntada final. A pesar del resultado, me voy tranquilo con la actitud que pusieron los jugadores en la cancha. Falta mucho, hay que seguir trabajando”
Sandro Coelho
Técnico de The Strongest
Me siento orgulloso de mis jugadores, han jugado desde el minuto 30 con uno menos. Nos defendimos bien, sin tirarnos al piso para hacer tiempo y sin sacar la pelota a las tribunas. Eso me reconforta, vamos por buen camino”
Sergio Apaza
Técnico de Real Potosí
Síntesis
The Strongest 0
Damián Grosso
Jorge Ortiz
(38"ST David Cerutti)
Herman Soliz
Rosauro Rivero
Percy Colque
Wílder Arévalo
Fernando Merlo
(1"ST Nelvin Soliz)
Alejandro Chumacero
Limberg Gutiérrez
Martín Menacho
(14"ST Carlos Saucedo)
Pablo Vázquez
DT: Sandro Coelho.
Real Potosí 0
Mauro Machado
Ronald Eguino
Ronny Jiménez
Edemir Rodríguez
Gonzalo Galindo
Luis Ribeiro
Nicolás Suárez
(28"ST Dino Huallpa)
Eduardo Ortiz
Roberto Correa
Darwin Peña
(38"ST Miguel Loayza)
Cristian Ruiz
(16"ST Gerardo Yecerotte)
DT: Sergio Apaza.
Sin goles
Estadio: Hernando Siles
Recaudación: 56.035 Bs.
Público: 3.953 entradas vendidas, 3.953 libres, socios 383
Árbitro: Hostin Prado
Asistentes: Alaín Ledezma y Néstor Aguilar
Expulsado: Eguino, 31"PT (RP)

EL "LOCO" ORTEGA

Mario Rolando Ortega, fué uno de los pocos jugadores símbolos que jugaron en The Strongest, manteniéndose en el club durante varias temporadas consecutivas, llegó en 1980 y se marchó a San José para jugar la Copa Libertadores de 1992 (es uno de los jugadores con mas presencias y con mas goles en la historia del club).

Cuando Ortega llegó a The Strongest, era el tiempo de los subcampeonatos en los que Wilstermann, de la mano de Jairzinho, Taborga, Bengoloea (padre), Terrazas y otros obtenían los títulos de 1980 y 1981. De todos modos The Strongest clasificaba a las Copas Libertadores y se constitutuía como el rival mas importante a la hora de pelear el campeonato.

Ortega se había formado futbolísticamente en Argentina, vivió en Santa Fé desde los 2 años, y esporádicamente en vacaciones regresaba a su Tarija natal, donde fué seleccionado juvenil (Campeón Nacional con Tarija en 1981).

Era el típico puntero derecho a la antigua, llegaba para desbordar y mandar centros al No. 9 de turno, pero también llegaba al gol metiendo diagonales y ensayando un remate seco y preciso que le caracterizaba.

Con el Tigre, vivió toda la década de los 80' donde nuestro club peleó, en desigualdad de inversión económica, los campeonatos a pura garra y esfuerzo, ganó los títulos de 1986 y 1989 y clasificó a varias Copas Libertadores.

Fué el "loco" del equipo, dicen que el jugador que lleva la "7" siempre tiene un poco de loco, y solía llevar, además de su enrulada y descuidada melena, vinchas y demás adornos que lo convertirían en un precursor de la moda adoptada años después en los '90 por Mohamed y Gamboa en Argentina.

Después de haber dejado todo en The Strongest, aún le alcanzó para destacarse en San José, donde clasificó por primera vez a la Libertadores a un equipo orureño, y donde también se lesionó y concluyó su carrea futbolística dejando, para quienes lo vimos, el recuerdo del guerrero díscolo, de esos que ponían huevos sin que nadie les tenga que gritar nada desde las tribunas.

Sandro Asume - Buena Suerte y mas que suerte!!!!!

LA CAÑADA: A pesar de que los jugadores en partidos pasados hayan puesto garra para vencer a ocasionales rivales de este apertura 2009, salvo el clasico y sobre todo en ese bochornoso primer tiempo se suma el desastre de Oruro producto tal vez por el bajon moral de perder chances de Campeonar. La disposicion tactica siempre estuvo a cargo de Toresani con sus altas y bajas esta vez saliendo de una manera intempestiva, viendo que el barco era una responsabilidad muy grande de llevar a buen puerto y de entrada hizo la mas facil dar un paso al costado, producto de su incapacidad su despedida fue con un resultado que hace muchos años no recibia el Tigre a nivel Nacional.

Hoy Sandro Coelho se hace cargo de este navio en pleno naufragio, pero como siempre que se estrena un nobel Tecnico esperamos con paciencia y con la actitud del Guerrero "Prepararse para lo peor; esperando lo mejor"

LA RAZON DIGITAL:

Luego de la presentación ayer en la cancha del estadio Rafael Mendoza Castellón, el nuevo entrenador Sandro Coelho dialogó con cada uno de los jugadores de The Strongest, a quienes comprometió a dar su mayor esfuerzo para sacar al Tigre del mal momento que atraviesa.
El capitán gualdinegro reemplaza al argentino Julio César Toresani, quien renunció el domingo y se despidió ayer en Achumani.
“Me siento contento por la confianza del directorio. Es una responsabilidad grande sacar al equipo adelante, pero con la unión de todos los compañeros volveremos a ser protagonistas. Ellos saben que como grupo tenemos un gran reto de mejorar”, dijo el capitán, quien llegó al elenco atigrado en 1997.
A las 10.15 arribó a Achumani Sergio Asbún, presidente del club, quien presentó oficialmente a Coelho como entrenador. La primera decisión de Sandro fue ratificar a todo el plantel para terminar bien el primer campeonato.
Coelho ya fue director técnico el año pasado en San José durante cuatro meses. Al ser consultado si va a continuar como futbolista, afirmó: “Vamos a ver si sigo jugando, pero me gustaría hacer bien las cosas en la nueva función que tengo”.
El cuerpo técnico será completado por sus compatriotas Jorge da Silva, quien será el preparador físico, y Joao Ricardo, auxiliar, ambos arribaron anoche a La Paz.
Coelho espera que se sume al equipo como asistente Luis Héctor Cristaldo, quien dará un respuesta final hasta el viernes.
Desde Achumani
Thiago LeitaoEl brasileño Thiago Leitao es una de las opciones que se maneja para el segundo torneo; el técnico lo tiene en planes.
Doble turnoEl DT Coelho ordenó que desde hoy se trabajará en doble turno. La primera sesión se iniciará a las 10.00 y la segunda a las 15.30.

WARIKASAYA (CUENTOS STRONGUISTAS) 2da Parte

Erica Bruzonick exhibe en su “Pierrot” lo hábil y experta cuentista que es, describiendo la resaca (ch aquí) de un magullado hincha atigrado que, con el fondo musical de Jaime Roos, va reconstruyendo los sucesos de los días anteriores (llevaba 2 de semi- inconsciencia) que han derivado en ese, cada vez mas vivido, dolor no solo físico.
Miguel Lundin Peredo (“Cuando Thor odiaba los goles de The Strongest”) refiere como Palomino Lamas descubre la identidad, sueca, de un asesino serial (ex jugador gualdinegro), que tenía como victimas a ignotos jugadores stronguistas del pasado.
Rodny Montoya, en su poema “Al Chupa Riveros”, deja su recuerdo metafórico-emocional del gran hincha inolvidable.
German Arauz Crespo, nos da una poco sutil “patada de bolivarista” con su “El Despertar”.
“El Oro de los Tigres” de Chirstian Vera, trayendo a cuenta un poema de Borges, hace una hermosa exposición de motivos por los cuales el hincha stronguista debe estar orgulloso de serlo; satisfecho de si mismo de toda la significación futbolística extra futbolística que implica el “ser tigre”.
Francesco Díaz Mariscal con su “De equipo no se cambia” trae a la memoria, por ejemplo, el juego de mini fútbol de las tapas coronas. En suma, es el la historia de la formación de un sentimiento germinal, el modo y las costumbres de un hincha que no se deja abatir por nada ni nadie, una de las tantas vertientes que confluyen a la misma pasión.
“Bloqueo” de Manuel Monroy Chazarreta, se aparta de la grandilocuencia e intenta una breve humorada imaginaria durante un bloqueo La Paz-Oruro.
Luís Serrano relata como “Maria” recuerda desde la distancia los anhelados sabores y olores del estadio Siles, en una tarde de clásico al ritmo de “Negra, zamba…”.
Paul Telleria, con “La Revancha” nos narra la posibilidad de una hermandad futbolera paceña (con un fin indeseable en este caso) que sobrepase los convencionalismos fútiles: como el rencor infantil o el amor por una mujer.
Carlos Vargas Guevara en “El Tigre y las cachinas” escribe sobre los recuerdos de un niño, presumiblemente orureño, entre elementos represivos e ingratos, y de cómo un tigre estampado en camisetas comenzaba un enamoramiento indefinido.
Inés Gonzáles Salas, retoma un tema recurrente en el libro: el devenir trágico del hincha stronguista en “El Chancho Colorado”.
Rene “Ciruja” Villegas, en un muy buen cuento “Chayñita de Acero”, relata la niñez de un hincha que premonitoriamente tuvo un encuentro místico con la chayñita en el, nuevamente doloroso, Viloco ’69; y como fue testigo presencial de la caída del avión de acero.
Ricardo Bajo cuenta en su “De cómo una mañana me convertí en Tigre”, su trayectoria emocional hacia/desde The Strongest, dejándonos en claro que a veces los por que sobran cuando del Tigre se habla.
Oswaldo Calatayud Criales, con “34 de Abril o la noche del siglo” deja un relato que, recordando un hecho puntual (el asesinato de un hincha stronguista), en lugar de acudir a recursos lastimeros nos invita a revisitar el lado combativo de nuestra historia, en un retroceso fantástico que incluye nuestra propia fundación.
Victor Montoya, “El Tigre de Achumani en el sueño”, escribió un cuento de corte infantil acerca de un tigre (de carne, hueso y técnica) goleador figura estelar.
Javier Badani Ruiz, con “El Hincha” nos cuenta como un padre (Demetrio Cayoja) puede desaparecer ante la vista de su hijo (Daniel) en una tarde de clásico desde la curva sur.
Liliana Carrillo, en quizá el mejor de los cuentos, escribe acerca de cómo una chica, contestona e inteligente, descubre que “No habia sido choli”.
Un libro excelente, emotivo por donde se lo lea, con pasajes de alta calidad y la participación de reconocidos escritores. Si uno es stronguista, es un deleite garantizado (excepciones mínimas que no deslucen la obra). Si uno es lector curioso solamente, igualmente encontrara en esta recopilación, un muy buen material de lectura. Si uno es bolivarista… ni modo “anhela lo que no puedes tener”.